Gracias

Se acerca Acción de Gracias.
Una de las pocas fechas en las que todo el país celebra a la vez,
más allá de creencias, partidos o colores.

Una fiesta que, por lo general, mueve millones de personas para reunirse con los suyos.
Pero este año muchos no podrán hacerlo.
No habrá abrazos largos ni sobremesas eternas.
Toca agradecer… a distancia.

Sentir gratitud —dicen los estudios— nos hace más felices, empáticos, fuertes y hasta dormimos mejor.
Y no hace falta mucho. Basta con mirar el cielo desde la ventana y pensar: gracias.

Pero, ¿cómo demostrar ese “gracias” cuando no podemos dar lo más valioso?
Nuestro tiempo.

La respuesta no siempre está en lo material, pero hay regalos que sí nutren.
Regalos que abrigan. Regalos sin prisa.

Un bizcocho recién horneado. Un libro de tu estantería con una nota dentro. Jabones artesanos, velas, una infusión especial. Una carta escrita a mano. Una llamada sin reloj. Una clase de yoga online. Una suscripción a app de música, o de meditación. Lo que sea hecho con tus manos.

Regalar no es acumular. Es recordar que pensamos en alguien.
Que le vemos, aunque estemos lejos y que nos importa.

Y tú, ¿qué te gusta regalar?
¿Y qué te gustaría recibir?

Feliz Acción de Gracias

Previous
Previous

Propósitos de año nuevo (2021)

Next
Next

Menos es más (pero no es nada)