Lo que me hace sentir viva.
Lo que enciende mis sentidos.
Lo que me arranca una sonrisa

La belleza no es un concepto absoluto.
Cambia con el tiempo, con la cultura, con la mirada.
Lo que en una época fue ideal, en otra puede parecer banal.

Tu casa es mucho más que un lugar donde estar.
Es un espejo. Refleja tu ritmo, tus ideas, tus prioridades.

En Japón lo llaman Ma.
En diseño, lo conocemos como espacio negativo.
Es el silencio entre las notas.

Despejar no es solo ordenar. Es abrir camino a la paz mental.
Al reducir nuestras pertenencias, ganamos espacio y tiempo para lo que de verdad importa.

Reducir es un proceso.
Y como todo hábito, requiere práctica.
Empieza por poco, hazlo cada día.